El espacio de enseñanza- aprendizaje, un modo de relacionarse

El espacio aúlico, cada una de las aulas, donde a diario concurre un grupo específico de alumnos, es un factor didáctico, puesto que nos ayuda a definir la situación de enseñanza-aprendizaje. La organización del espacio del aula, nos permite reconocer el tipo de didáctica que allí se desarrolla y nos permite crear un ambiente estimulante para el progreso de todas las capacidades de nuestro alumnado.

En la educación secundaria, el aula conserva características del espacio y distribución del mobiliario, tradicionales. Promoviendo una educación frontal, en la que los alumnos se ubican uno detrás del otro, dinámica de clases que responde a un tipo de didáctica expositiva, para que todos estuvieran atentos a la explicación y exposición del docente. En la actualidad, los cambios de paradigmas, propician, sin dejar de lado, la necesaria exposición y aportación del profesor, favorecer un aprendizaje interactivo donde los adolescentes aprenden también de sus pares. El espacio educativo debe facilitar la innovación y prácticas pedagógicas renovadas (trabajo en equipo, rotación de los alumnos en aulas temáticas, entre otras). Los espacios rígidos, donde los alumnos se distribuyen en puestos asignados, se ha comprobado que no colabora con la puesta en práctica de metodologías para el desarrollo de muchas de las habilidades o competencias, en especial, algunas que son claves como la colaboración, la cooperación, la comunicación y el aprendizaje entre iguales.

reformas aulicas lujan1Por eso, a partir de los nuevos paradigmas, hemos emprendido la modificación del mobiliario escolar, comenzando con los 5° años, reemplazando los antiguos pupitres y sillas individuales, por mesas de seis sillas que permita el trabajo en grupo, al mismo tiempo que seguirlas explicaciones e indicaciones del profesor. La reorganización del aula, se convierte en un recurso dinámico que favorece la comunicación y el trabajo.